domingo, 15 de febrero de 2009

Somos 100


Extranjera en el 7-D, el blog, no yo, nació el 31 de julio de 2008, exactamente 18 días después de mi llegada a la ciudad. El primer post, Y llegué al 7-D, vió la luz, o en este caso la web, a las 8:20, hora Nueva York, pero lo empecé a escribir a las 7:40 pm, cuando mi padre todavía estaba aquí en la ciudad, en el apartamento, dejando a su niña (yo, evidentemente) instalada.
Él estaba sentado en el sillón blanco que hizo las veces de sofá hasta que el de color vainilla llegó, y veía con curiosidad hacia el escritorio. Yo creí que no tenía idea de qué estaba haciendo, pero días después, cuando ya estaba él en Caracas y le comenté la apertura del blog, me dijo "sí, yo sé, lo empezaste a escribir el primer día que dormiste en el apartamento".
En un cuaderno de cobertura naranja que esta arrumado entre libros y que guarda teléfonos de corredores, direcciones, datos útiles, pensamientos varios de esos días, y hasta las anotaciones sobre la carta astral que me hice antes de dejar mi país, está el boceto de lo que diría mi perfil. Empecé a escribirlo, malhumorada por no encontrar apartamento, en el tren de regreso del Grand Central Terminal a Larchmont, donde vive la prima con la que nos estábamos quedando. "Uno es del país que lo vio crecer, no del que lo vio nacer" y "no quiero que este sea un blog sobre el desarraigo aunque precisamente eso es lo que necesito que sea" son frases que nunca publiqué y que ahora encuentro en las tres últimas páginas del cuadernito.
La idea del blog estuvo en mi cabeza desde mi primera semana en la ciudad, cuando sufría para comprar un celular o abrir una cuenta de banco, pero la miraba con cierto exceptisimo pues en dos oportunidades intenté tener blogs, uno con Sofía, mi amiga del alma, y otro con Licantro, y no prosperaron. A este esceptisimo se sumó el hecho de que el acercamiento más íntimo que había tenido en el mundo de los blogs había sido un reportaje sobre los blogueros venezolanos, una experiencia traumática, que incluyó amenazas, varios correos de reclamo, y hasta una mención en el defensor del lector. Aún así, lo que llevaba por dentro ganó. Era tan grande que necesitaba sácarmelo. No podía procesarlo sóla.
El primer post sólo tuvo 2 comentarios, en realidad uno, de mi madre, porque el otro fue mi respuesta. No me importó. En el segundo post, escrito dos días después, me llegó mi primer comentario de alguien no conocido; Doña Treme habló sobre el género del blackberry, para ella es ella, para mí es él.
Fue con Luis el que extrañaba las pupusas, mi octavo post, que se me ocurrió contar la historia de alguien más, y descubrí en otras voces, la mía propia. Creo que también asimilé que podía escribir; es decir, aunque desde hace 7 años que trabajo como periodista nunca había tenido la certeza de que escribiría mis propias historias, sin reglas, sin límites, sin requerimientos de nadie.
De las 100 entradas, todas han sido escritas en mi Toshiba obsoleta de diecisiete pulgadas, 97 desde mi escritorio negro y madera clara, sentada en mi silla blanca de espaldar largo y apoya brazos negros, siempre con un vaso de agua al lado y algunas veces con una taza de café o té. Caramelo delicioso I y II, aquella historia de Candy la negra, fueron escritas en New Orleans, en la cama de mi prima La Pata, en su apartamento de una habitación, en el bien llamado Pink Palace; y Mandamientos para una vida más feliz: No intentarás ser Marilyn Monroe bajo la lluvia fue escrito en un autobús New York-Washington.
Precisamente en la capital estadounidense comencé a escribir La ciudad de los importantes, pero lo terminé de escribir aquí en el escritorio del 7-D. De hecho, si bien no sé cuál es mi post favorito puedo decir, sin dudas, que ese es el que menos me gusta. Es difuso, no llega al punto, y es demasiado largo, para una idea más bien concisa. Aún así, tuvo un comentario, al contrario de Caramelo delicioso I, Ojos que no ven, El dolor siete años después, Esta película me la conozco, y La belleza en mis ojos, los únicos sin comentarios. Vestirse en el frío (y) III: Those bitches, la nota en la que puteaba sobre las neoyorquinas, sus minifaldas y sus piernitas peladas, obtuvo 19, la mayor cantidad de comentarios (con trampa pues estoy contando mis respuestas).
Por culpa de un sol inaspectado, el relato sobre mi perdida de regreso a casa; En tu espera, La llegada, finalmente, ambos dedicados enteramente a Licantro; Llora pequeña; la descripción de uno de mis ataques de llanto, El dolor que inmoviliza, una crónica de los pasos gigantes que debía hacer para levantarme de la cama y El lugar de Erik fueron escritos mientras lloraba o justo después.
Todas las historias las escribo directamente en el blog, sin el método word copy paste, casi todas con una urgencia inaplazable, como si alguien me tuviese agarrada por los pies, boca abajo, como un niño pequeño recién ahogado que hay que voltear para que deje salir el agua de su cuerpecito. En vez de agua yo he dejado salir nostalgia, dolor, ansia, angustia, tristeza, asombro, compasión, alegría, y en algunas ocasiones felicidad.
Ahora, cuando son aquí las 8:23 pm, a cuatro días de cumplir siete meses en Nueva York, y en una noche en la que el futuro de Venezuela luce negro, negro que asusta, escribo ésta, la número 100. Mientras observo a Licantro desde mi escritorio negro y madera clara, enrollada en mi bata de peluche, me siento feliz. A pesar de los pesares he logrado algo. He hecho algo con este blog. Por mí, porque quiero, porque me lo he propuesto, porque lo he necesitado, porque me ha dado alegrías, porque me ha mantenido cuerda, por que sí. Ahora, cuando ya son las 8:46 pm y tengo ganas de llorar pero me rehuso a hacerlo, termino esta entrada.
Gracias.

16 comentarios:

Andrés Schmucke dijo...

Feliz primeros 100 post, quiero ver 100 más y luego 100 más y así.

Debriamos hacer algo juntos tu y yo.

Y las cachapas con salsa de tomate son lo maximo.

yacasinosoynadie dijo...

Impresionante como un blog se vuelve una vida y poco a poco notas que respira y vive, notas que a medida que lo alimentas crece más… Pues Extranjera gracias a ti, desgraciadamente llegué muy tarde a este lindo lugar, pero espero visitarlo seguido de aquí en adelante. Un abrazo y feliz cumpleaños.

Terapia de piso dijo...

Te felicito 100 veces. Te adoro 100 veces. Te necesito 100 veces. Te extraño 100 veces...

José Roberto Coppola

Anónimo dijo...

FELICITACIONES!!!!

Recuerdo que cuando publiqué mi entrada número 100 vos me dijiste que faltaban sólo 5 para la tuya! Y acá está!

Menudo análisis del blog, jaja. Me pareció extraño, no es tu estilo ser tan analítica, me parece que sos más pasional

Y lo de la tristeza, sí, es verdad, es así: uno a veces elige y hasta disfruta ser triste. Hay algo, no sé si de morbo, de comodidad o de necesidad de llamar la atención y requerir afecto, que nos atrapa y nos hacer ser tristes… La nostalgia tiene lo suyo, hay que reconocerlo.

Además, si te tomás todas las cosas bien, supongo que la vida sería un poquito más aburrida… por eso lo mejor es ir variando, no?

Bueno niña, estoy contento porque hayas hecho algo muy bueno de tu blog!

Y estoy triste porque hace mucho que no te veo por el barrio…

Besitos

Gastón dijo...

Escribir es uno de los inventos más maravillosos que ha alcanzado el ser humano.
Es un deshaogo, un grito por escrito, es poner en palabras lo que no se puede poner en palabras, es crear sueños estando despierto, es una compañía que está más allá del teclado, de nuestras manos, de la tinta china.

Y el mundo blog...
Vaya mundo más mágico, en que desconocidos se vuelven tan conocidos.
En que las personas opinan, dicen, comentan, pero por sobvre todo leen y escriben.

Brindo por estos 100 escritos que ya forman parte de tu vida... y un poco también de la nuestra, ¿no?

Cien besos desde mi Buenos Aires querido

C@rol dijo...

Lo haz hecho muy bien extranjera. 100 FELICITACIONES para ti, una por cada post. Deseo que sigas escribiendo con tanta pasion como hasta ahora. Gracias a TI por permitirnos ser parte de tus historias, que me ayudan a ver un poco mas alla.

Saludos *B-)

Lorena J. Saavedra dijo...

Qué hermosa tu felicidad... y en este sito podemos encontrarnos, ya miles... ya los mismos de siempre. Esto es como ir a ese café que tanto te gusta, ves a las mismas personas y charlas un rato. Vuelves a casa y te sientes feliz de verlos. Felicidades, Extranjera, queremos quedarnos mucho más rato a tu lado. Besos, lore

Carito dijo...

Muchas Felicidades!!!!!!!!!!
Esperamos seguir leyendo miles más!

Vanesa dijo...

Gracias por regalarnos 100…espero que vengan 100 en cantidades industriales! Y que siempre con esa sinceridad…con la nostalgia y con esa magia que tienes…un beso!

Luciana dijo...

Mi querida extranjera,

Excelente Post! Nos has recorrido por lo que ya son 7 meses escribiendo, traducidos en 100 historias fabulosas.

Me impresiono muchisimo descubrir que escribes directo en el blog. Wuao! Me quito el sombrero.

Siempre te he dicho que me atrapa tu forma de contar las cosas. Transformas cualquier idea en algo sublime o entretenido. Ademas, tienes ese ojito clinico para ver cosas que los otros no ven... o para darle voz a lo que todos ven.

Felicitaciones en este aniversario y si dios quiere continuare acompanandote en alguna de esas historias.
La Lu

Jardinero del Kaos dijo...

Felicitaciones!!!!

No recuerdo como llegue a tu blog, si mal no recuerdo mi premer encuentro fue en el post de las perras Neoyorquinas con minifaldas y vos y tus amigas cagandose de frio,

siempre me pego una vuelta, tal vez sin comentar, por que mas vale mantener la boca cerrada y pasar por estupido que abrirla y demostrarlo...

en fin la nostalgia, melancolia y el llanto(deberias ser argentina, niña)

besos!!!
apor 100 mas!!!

Unknown dijo...

Me hacía mucha, pero mucha falta leerte. Ojalá, cuando tenga 100 entradas más, pueda escribir así.

Besos, estamos hablando

Pulgamamá dijo...

Andrés: gracias, que sean 100 más. Probaré lo de las cachapas y te aviso.
Yocasinosoynadie: totalment cierto, es impresionante como crecer un blog, como agarra personalidad. Te espero más seguidos. Me alegra mucho habernos conocido.
Terapia: 100 veces por 100 te digo cuanto te quiero y cuanto te extraño.
Galán: gracias. Ya te expliqué por qué mlo del análisis racional. En realidad me provocó experimentar.
Gastón: escribir es maravilloso y los bligs han resultado ser una sorpresa. He conocido tanta gente (vos incluido), me han dado tanta felicidad.
Carol: gracias espero que sigas siendo parte
Lore: gracias bella. Es verdad, para mí es eso, un café donde ves a los de siempre y eres feliz.
Carito: sí va, que sean mil más.
Vane: menos mal que no les molesta la nostalgia, a veces leo lo que he escrito y siento que la nota nostálgica es demasiado intensa pero bueno en verdad eso es lo que me sale.
Lu: bellq por lo que dices de mi escritura. Tu eres una parte importantísima de Extranjera.
Jardinero: ah no, yo quiero que hables más. Y sí, siempre creido que hay una argentina que vive en mí. Amo el tango. Amo el vino argentino, Amo sus alfajores y Amo Buenos Aires.
Corina: hacías falta. Que bueno que te gusta y que me sigues visitando.
Un abrazo a todos!

Anónimo dijo...

Querida,
has logrado mucho: escribir. has logrado una continuidad, una disciplina, una entrega, que no se encuentran a meunudo.
Un abrazote

Anónimo dijo...

Hola Carlita. Soy Irene
Felicidades por los 100 post!!! aunque ya tiene más....
Desde la ciudad de Barcelona, tan familiar y extraña para mí, te mando un abrazo y espero que todo vaya mejor; que para eso fue que nos fuimos, no?
Espero que ,logres encontrarte en esas calles tan extrañas o que al menos disfrutes el hecho de no encontrarte.
Te leo siempre que puedo, en una tarde como hoy donde no tengo mucho que hacer en el trabajo o huelo la posibilidad de perderlo. Pero me gusta mucho saber de tí y ver que no soy la única que va pensando esas cosas mientras voy en el metro o intento cortarme el pelo en una pelu de 10 euros.
Saludos y ánimo...mucho ánimo!!!
Irene

alinitaxula dijo...

Mi niña y que vengan muchos más que aquí tarde que temprano te leemos
con cariño¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
besitos
alinita