lunes, 21 de junio de 2010

jueves, 3 de junio de 2010

Primero al Sur y de ahí vemos

Se veía venir. Desde hace algún tiempo siento que Extranjera (el blog, el personaje) se desvanece ante una verdad serena y más bien cómoda: Este lugar, al que a veces quiero y otras no tanto, se ha convertido en mi hogar. Y no hablo únicamente del 7-D. Hablo de Nueva York. Hablo de mis amigos. Hablo del mundo, todavía un poco inestable, que me he creado.

Han pasado casi dos años y mi forma de ver las cosas, de apreciar la realidad ha cambiado. La nostalgia sigue, y seguirá, por todo el tiempo que continúe lejos de mis afectos, pero ese sentimiento amargo de desolación ha desaparecido y con él ha comenzado a desvanecerse Extranjera.

Inventé a Extranjera porque la necesitaba. Porque mi vida sin ella, en aquel momento hubiese sido imposible. Extranjera era la única manera de ser, de vivir, y aunque extranjera siempre seré, la Extranjera que nació con este blog ya no está.

Ya no miro las cosas con la inocencia de quien las mira por primera vez porque la realidad se me hace repetida. Ya no siento eso que sentía antes en el estómago que me obligaba a sentarme en la computadora a pesar de todo. Ya no me salen las letras de los dedos como antes. Ya no puedo escribir como Extranjera, ver como Extranjera, sentir como Extranjera.

Tal como los escritores crean personajes para contar una historia, yo creé a Extranjera en el 7-D para contar estos dos años que han pasado. Y tal como los escritores matan a los personajes, o los mandan a una clínica, o los reinventan, yo he decidido llevarme a Extranjera. Llevarme a Extranjera de a poco.

Me explico, lo primero que pasará es que Extranjera se mudará al Sur por dos meses.

No había contado nada, pero el sábado me voy a Chile a hacer unas pasantías con la agencia de noticias AP. Se supone que me iré a Chile a trabajar, pero mi plan secreto (ni tanto, porque ya se lo he dicho a todo el mundo) abarca tres puntos: beber vino, rodearme de artistas y tener conversaciones trascendentales.

Bueno, quien sabe, cada vez que uno hace planes no salen como uno los quiere, así que probablemente termine trabajando como una loca sin conocer a artistas ni tener conversaciones trascendentales (el vino no se negocia).

Abriré un blog, que llevaré dos por dos meses, sobre las andanzas de Extranjera en el Sur del Sur y después, después veremos. No sé si dejaré a Extranjera en la blogosfera ahí como una niña abandonada que espera a la salida del colegio a que los papas la busquen, o si cerraré con llaves las puertas del 7-D, pero lo que si es seguro es que de una forma u otra seguiré escribiendo. Y siempre los mantendré al tanto.

Licantro viene conmigo sólo en el corazón pues debe quedarse trabajando en Nueva York.

Extranjera termina entonces como empezó: sola y en una tierra desconocida.


Gracias por el viaje.

pd: en cuanto este listo linkeo la dirección del blog que llevaré en Chile.