lunes, 15 de septiembre de 2008

Tres hombres hacen la siesta en Union Square



Ah A-nah! que pedía entre signos de exclamación posts con foto .

La evidencia: Esta fotografía tomada con mi Blackberry a las 5:30 de la tarde del día lunes 15 de septiembre de 2008.

Los protagonistas (de izq. a der.):
Hombre 1: sujeto de cabello gris, pantalón floreado, camisa camuflajeada y un maletín estilo carry-on azul marino.
Hombre 2: negro barrigón de camisa negra, maletín negro, chanclas negras y bastón.
Hombre 3: Sujeto con la cabeza acostada, casi descolgada del resto del cuerpo, y chaqueta verde militar guindada de la esquina del banco.

Los hechos: Lleve a mi prima Pachi, la hermana menor de La Pata que está de vacaciones en NY, a conocer Union Square en la calle 14. Decidimos entrar a la plaza y recorrerla enteramente (no es demasiado grande) y nos topamos con Hombre 1, Hombre 2 y Hombre 3 dormidos en el banco. Nos llamaron la atención de inmediato, pero seguimos de largo por tres segundos hasta que nos dijimos que esa escena, que parecía casi una pintura, era una gran fotografía.
Nos daba temor que se despertasen y se diesen cuenta de que ahí estaban ellos como criaturas de circo y ahí nosotras como espectadoras morbosas, pero no nos importó. Después de tomar varias (tres cada una) nos dimos cuenta de que un grupo de adolescentes europeos risoteaba con precausión mientras disfrutraba y capturaba la escena.
A los 5 minutos, Hombre 1 se se despertó. Aunque en la fotografía puede parecer que estaba agachado buscando algo, la verdad es que tenía los ojos cerrados y la apariencia serena de quien tiene la mente y el espíritu en otra parte. Hombre 1 levantó el torso, alzó un sólo brazo, bostezó, se llevó la mano del brazo levantado a la cabeza y se la rascó. Un rato después llamó con gestos a otro hombre y este vino le dijo algo y se fue. Luego otros dos chicos llegaron y le dieron una caja verde de algún medicamento que no pude reconocer pero que era de 400 mg. Me llamó la atención que Hombre 1 no miró a Hombre 2 ni a Hombre 3. Sí le hizo un número dos con los dedos a otro sujeto desaliñado que luego se acercó y le dijo algo al oído.
A los 5 minutos (es decir a 10 de estar parada en el árbol de enfrente mirando toda la escena) Hombre 3 se levantó. Estiró ambos brazos, se soltó la cola que llevaba en el cabello largo y pegajoso, se paró del banco sin mirar a Hombre 1 y Hombre 2 y caminó hasta otro donde estaban dos hombres: uno joven, el otro viejo. Desde ahí nos miró con desconfianza a Pachi y a mí. No le hicimos caso.
Hombre 2 tenía el brazo por detrás del banco, levemente puesto sobre la espalda de Hombre 3, quien pareció no percartarse del detalle. No se movió ni un milímetro, y se quedó ahí con su pierna estirada, con la chancla como si se fuese a salir y el dedo índice de la mano colgado en dirección al suelo.

Las supocisiones:
Al contrario de las reglas periódisticas que indican que no se debe asumir nunca nada, ni lo más evidente, yo asumiré y supondré algunas cosas sobre la siesta de los tres hombres a partir de la fotografía.

Hombre 1:
A) O no tiene domicilio fijo o está llegando de viaje, a juzgar por la maleta que está a su lado y que casi no sale en la fotografía.
B) Tiene poca ropa o mal gusto al vestir porque casi ningún hombre en su sano juicio combinaría flores azules con camuflaje verde.
C) Podría pensarse por la caja de medicamento que le traen los dos chicos o por la seña que le hace a otro de los hombres que es drogadicto, traficante o está enfermo.
D) La posición del cuerpo, como si estuviese a punto de levantarse, es un indicativo de que o es el menos cansado de los tres o es el que menos dormido está.

Hombre 2:
A) Está realmente dormido pues en el tiempo que Pachi y yo estuvimos allí no se movió en ningún momento y mantuvo hasta los gestos que lucen más incómodos en su postura, como lo son el dedo índice, y la chola a punto de salirse.
B) O es ciego o tiene una dificultad al caminar, pues no tiene la pinta de quien usan bastón sólo por pavonearse.
C) Definitivamente conoce a Hombre 3 porque está demasiado cerca de él (nótese que pareciera que ambas piernas estuviesen a un ápice de tocarse) y porque éste al despertarse no hace ningún gesto de extrañeza, de la clase que dice "pero a éste qué le pasó".
D) Lleva menos pertenencias consigo que Hombre 1, pues además de que el maletín es visiblemente más pequeño, por la forma en que la tela se hunde, no paciera estar muy lleno.

Hombre 3:
A) No le importa estar dormido en el medio de un parque a juzgar por la postura totalmente distendida que mantiene: la cabeza hacia atrás en posición de total relajación y la boca abierta como quien está a punto de babearse o lo hizo hace un rato.
B) O salió de su casa demasiado temprano cuando hacía frío o va a llegar muy tarde cuando refresca, o no tiene casa, pero la chaqueta colgada en la esquina del banco debe responder a alguna de estas tres opciones pues hacía casi 30 grados centígrados en ese momento. Por eso, claro está, no la tiene puesta.
C) Su cabello pegajoso y en exceso brillante denota que o no se ha bañado en varios días o su pelo es de tipo grasoso o ambas.
D) No le gusta el voyerismo, o no al menos el que le hacen a él o a sus compañeros de banco, pues nos miró a Pachi y a mi con mala cara apenas se dio cuenta de que estábamos observándolos.

Hombre 1, Hombre 2 y Hombre 3:
Es difícil precisar la relación exacta entre el trío pero me atrevería a decir que los tres son compañeros de Plaza, compañeros de banco, y que posiblemente esa no sea la primera vez, ni la última, que hacen la siesta juntos en ese lugar. Diría también que Hombre 2 y Hombre 3 son los que más se conocen, de repente han compartido cervezas y conversaciones, pero no son amigos del alma pues si lo fuesen, pienso yo, Hombre 3 hubiese mirado a Hombre 2 al despertarse.

1 comentario:

Ana dijo...

¡Yei post con foto! ¡Sáquele el jugo a ese Blackberry cará!

Y cónchale, reivindicando al tipo dormido, si el camuflaje con floreado se lo pone Heidi Klum ahí sí... ¿no?