domingo, 26 de octubre de 2008

Vacilaciones sobre un sombrero

Conversaciones al borde de la madrugada con Federico mi costilla justo antes de su partida.

- Ese sombrero tuyo si que te queda bien, dijo Federico a la distancia, mientras terminaba de arreglar sus maletas.
- Sí verdad, me gusta tanto que quiero dormir con él. Gracias por decirme que me lo comprara porque la verdad era un poco caro, dije yo echada desde el sofá.
- Yo pienso que cuando a alguien le queda bien algo debe comprárselo en todos los colores. Lástima que no había sino ese azul. Has debido comprártelo en todos los colores.
- Sí, ya sé. Voy a ir a otro Filene's basement sin decirle a Licantro y me compro dos más.
- (risa de Federico). Totalmente.
- Entendí cuál es el éxito de esta boina y porque me queda mejor que la amarilla que me compré en Target. Párame que esto es importante, dije yo, todavía echada en el sofá.
- Te estoy oyendo, sólo que no puedo dejar de hacer maletas, contestó el Fede. Dime, ¿cúal es el secreto de tu sombrero?
- Es el doblés que tiene el cashemire, que permite que caiga sim importar para que lado te lo pongas.
- (En este punto Fede se acerca al sofá y revisa la boina) Es verdad. ¿Y cómo se mantendrá ese doblés? Es curioso.
- Porque está hecho con plancha y ya no se le quita mas nunca, le contesté.
- Estás hablando tonterías. Mejor vete a dormir.
- Sí, ya sé. Es sólo que no quiero que te vayas.
- Sigues hablando sin sentido. Ve a dormir.
- Okey pero con el sombrero.
- Está bien. Mira (dijo justo antes de que me fuera a la cama), yo también te voy a extrañar.


2 comentarios:

Anónimo dijo...

Quién de niño no se fue a la cama vestido de su disfraz favorito o con ese juguete que no quería desamparar. Cuando nos gustaba mucho algo hacíamos que acompañara nuestros sueños. Entonces duerme con tu boina de cashemire azul y te sentirás niña de nuevo.

Federico Pola

Pulgamamá dijo...

Que bello tu comentario mi Fede. Amo mi boina azul. Ahorita mismo la tengo puesta. Me hace sentir feliz.
Te quiero